Las zonas francas dominicanas son las que tienen menor integración vertical con el resto de la economía, en comparación con el vínculo que tienen las de la región del Caribe, Centroamérica y América del Sur. El hallazgo fue hecho por el Banco Mundial que lo expresa en sus recientes Notas de Política de República Dominicana, del capítulo “Para Construir un Mejor Futuro Juntos”. “La mayoría de las actividades en las ZF están aisladas del resto de la economía, reduciendo el potencial para externalidades y repercusiones positivas”, dice el documento. Agrega que “la literatura sobre las ZF en República Dominicana discute extensamente la falta de encadenamientos hacia atrás, aunque la evidencia directa es escasa”.
Usando encuestas empresariales, el Banco Mundial encuentra que las empresas dominicanas de Inversión Extranjera Directa (la mayoría de ellas ubicadas en las ZF) importan casi el 70 por ciento de sus insumos comparados con 49 por ciento en la región del Caribe, 58 por ciento de Centroamérica y 43 por ciento en América del Sur y México, expone el documento.
“Las ZF no están comprando insumos de proveedores nacionales, lo cual limita el potencial para transmisión de conocimientos, aprendizaje sobre la marcha y mayor eficiencia. Otra interpretación posible es que la falta de encadenamientos con el resto de la economía puede indicar que la mayoría de la riqueza generada por las exportaciones se queda en las compañías de ZF que usualmente son de propiedad extranjera”, precisa el BM.
Más allá de los problemas de encadenamientos intersectoriales en la economía nacional, República Dominicana enfrenta retos para mejorar su competitividad en un mundo cada vez más globalizado. Aunque las exportaciones de bienes y servicios han aumentado en valor, su participación del PIB se ha reducido, de 35.8% en 1995 a 24.6% en 2015.
Según el Banco Mundial, a pesar de los avances recientes en las clasificaciones de Doing Business, RD aún tiene procedimientos reglamentarios complejos y costosos.
Fuente: El Caribe